En algún momento de nuestra vida, TODOS hemos experimentado una sensación de vacío existencial y la abrumadora necesidad de llenarlo con algo o alguien.
Pasamos gran parte de nuestra vida en busca de aquello que nos haga sentir completos y cuando finalmente lo alcanzamos, notamos como al poco tiempo, esa sensación de vacío existencial aparece de nuevo y nos preguntamos…
¿Qué podrá llenar realmente ese vacío?
Es allí donde nacen las preguntas existenciales que han acompañado a la humanidad por siglos, ¿Quién soy?, ¿Qué hago aquí? ¿Cuál es mi propósito en la vida?
Son muchos años los que pasamos asistiendo a instituciones que nos lo enseñen y es sorprendente como esta pregunta pareciera que se relegara a unas cuantas clases en la materia de filosofía y en el mejor de los casos, en los espacios de orientación vocacional o retiros espirituales.
Al llegar a la adultez, el vacío existencial se incrementa y empieza la queja por no haber tenido tiempo para conocernos, saber quiénes somos, deseamos y realmente valoramos.
Es entonces, cuando nos convertimos en autómatas materialistas que trabajan cada día por adquirir bienes costosos de bajo valor a cambio de los recursos más valiosos, sin entender el tesoro que estos representan.
De repente, aparecen las crisis que nos obligan a regresar al centro, a lo esencial, a la búsqueda de una respuesta que alivie el sufrimiento.
Asistimos a toda clase de conferencias y talleres en donde nos enseñan los secretos de la felicidad, la nueva técnica o la meditación milenaria recientemente descubierta.
Actividades en las que finalmente encontramos algunas respuestas y una sensación pasajera de bienestar en el mejor de los casos, antes de caer de nuevo en la misma sensación de vacío, frustración y desilusión.
Lo que muchas veces no logramos comprender es que no todos los libros, talleres, técnicas y experiencias son para todo el mundo.
La importancia de la personalidad
La personalidad juega un papel muy importante a la hora de abordar estos asuntos y un consejo que podría ser la respuesta que una persona necesitaba, en otra persona podría no tener ningún efecto o peor aún, podría estar profundizando aun más su crisis.
Es por ello por lo que debemos emprender nuestro camino de autoconocimiento lo más rápido posible.
Aquí se empieza a llenar realmente ese vacío existencial, pues en el autoconocimiento no solo encontrarás gran parte de las respuestas que habías estado esperando y la sensación de plenitud que todos anhelamos.
También, aprenderás a elegir y seleccionar más conscientemente los libros, experiencias y técnicas que funcionen para ti.
Si estás preparado para emprender un verdadero viaje hacia el lugar donde se responden todas las preguntas existenciales (en tu interior) y donde se generan cambios sostenibles, te invito a que conozcas Auténticos, el taller de autoconocimiento que usa el eneagrama para acelerar este proceso.
Aquí tienes el enlace que te lleva a liberar lo que eres… a ser auténtico
En este espacio comprenderás que cada uno de los seres humanos ve el mundo desde un determinado tipo de filtro, el cual distorsiona la realidad e impide ver con claridad toda tu grandeza y potencial ilimitado.
Existen personas, que desde muy temprana edad han llenado esos vacíos usando herramientas en sus propias experiencias y hoy, las comparten para ayudar a otros. Te recomiendo a viajerainterior.com
El momento perfecto es aquí y ahora…
Despierta el líder extraordinario
que llevas dentro